¿Sin pena ni gloria?
– Urge nuevo formato
– AMLO se debe corregir
– Anaya sigue con lo mismo
EL segundo debate de los candidatos presidenciales que se llevó a cabo en Tijuana, Baja California Norte pasó sin pena ni gloria, aunque, a decir verdad, con más pena que gloria.
Con un formato distinto y con periodistas que actuaron como tales y no como moderadores, se vieron la cara por segunda ocasión ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, RICARDO ANAYA CORTÉS, JOSÉ ANTONIO MEADE KURIBREÑA y JAIME RODRÍGUEZ CALDERÓN. Tras su retiro de la actual competencia eleccionaria, brilló por su ausencia MARGARITA ZAVALA DE CALDERÓN HINOJOSA.
Con ciudadanos como testigos y cuestionadores, el debate, que se efectuó en instalaciones universitarias, prácticamente se convirtió en un ring político en donde el tabasqueño volvió a ser el centro del ataque de sus contrincantes.
El detalle chusco salió a relucir al momento en que LÓPEZ OBRADOR cuidaba su cartera cuando ANAYA CORTÉS se acercó a su atril para encararlo. El pincelazo hipócrita, cuando RODRÍGUEZ CALDERÓN pidió a AMLO que abrazara a RICARDO y a MEADE KURIBREÑA.
A juicio de muchos, ANDRÉS MANUEL corre el riesgo de perder la delantera que ha mantenido desde el inicio del proceso eleccionario al pretender solucionar la gravedad de la problemática azteca con el simple argumento de acabar con la corrupción e impunidad. De acuerdo a esa corriente de opinión, el cáncer está tan avanzado que forzosamente se requiere de una explicación más detallada que supere lo que podría considerarse como mera demagogia.
El candidato de la coalición “Por México al Frente”, que integran el PAN-PRD-MC, además de no lograr aniquilar la presunción de lavado de dinero, mantiene su misma retórica con el apoyo de sus dotes de orador, pero se extralimita en su crítica a quien encabeza la alianza “Juntos Haremos Historia”. Tal parece que al exdirigente nacional del PAN le interesa más descalificar a LÓPEZ OBRADOR que reforzar su proyecto en busca de la silla presidencial.
Y… los que son las cosas.
En el segundo debate convocado por el Instituto Nacional Electoral (INE), JOSÉ ANTONIO MEADE, quien se ha mantenido en la tercera posición de acuerdo a resultados de distintas empresas encuestadoras, proyectó una mejor imagen ante cámaras y micrófonos que sus punteros rivales políticos.
“El Bronco” RODRÍGUEZ CALDERÓN, quien participa por la vía independiente, navega viento en popa cumpliendo al pie de la letra su real función en el actual proceso electoral en donde está en juego la presidencia de la república. Sabe, bien que sabe, que su participación no lo llevará a ser el nuevo inquilino en Los Pinos ni a despachar en el Palacio Nacional, pero, eso sí, no quita el dedo del renglón en su misión por intentar restarle popularidad a ANDRÉS MANUEL.
Para evitar lo dimes y diretes, sería conveniente que el INE estableciera un formato en donde los candidatos presidenciales expongan en tiempos iguales sus propuestas concretas en temas de interés nacional y dejar a un lado ataques y críticas que no aportan nada de beneficio colectivo.
DESDE EL BALCÓN:
En el contexto del proceso electoral que se vive en el país, vale la pena referir lo que está sucediendo en la esquina noreste tamaulipeca en donde compiten por la alcaldía JESÚS DE LA GARZA DÍAZ DEL GUANTE por el PRI, CARLOS ALBERTO GARCÍA GONZÁLEZ por el PAN, MARIO LÓPEZ HERNÁNDEZ por MORENA, MYRIA ZELDI LEAL GUAJARDO por el PVEM y HUMBERTO RANGEL VALLEJO por la vía independiente.
Los tres primeros vienen desarrollando intensas jornadas de proselitismo en zonas urbanas y rurales con mayor margen de aceptación entre los ciudadanos con credencial de elector.
Las concentraciones masivas logradas en el arranque de sus respectivas campañas dejan entrever que el primero de julio será un día de suma importancia para los matamorenses.
Y hasta la próxima.
