Le ponen sal a sus palomitas y se divorcia

El 27 de mayo, la policía de Brookfield, Wisconsin, respondió a un llamado de disturbios internos en el Marcus Majestic Cinema.

La mujer que llamó a la policía le dijo a los agentes que ella y su esposo estaban esperando en la fila para comprar palomitas cuando él le pidió que no les pusiera sal y se fue por otra cosa. La mujer, sintió que tenía derecho a echarle sal a las palomitas que ella había pagado, entonces lo hizo, a pesar de la petición de su marido. Cuando el esposo se dio cuenta de lo que había sucedido durante su ausencia, supuestamente terminó su matrimonio y se negó a ver la película, alegando que su esposa le había sido infiel por hacer cosas a sus espaldas.

Luego, en un acto de rebeldía, la esposa tomó las llaves del auto de su esposo y vio la película sola, mientras el esposo esperaba afuera del cine.

Después de que la película terminó, la mujer encontró a su marido. Aún tenía sus llaves, ya que, como le dijo a los oficiales, él maneja demasiado rápido cuando se enoja. El marido se paró afuera del automóvil, negándose a entrar, y la mujer, ahora preocupada por cómo su marido llegaría a casa, llamó a la policía para preguntarles qué hacer. Le dijeron que lo resolviera por su cuenta y que su marido era un adulto que podía tomar sus propias decisiones.

Más tarde, la esposa confirmó que no hubo violencia física, que su esposo no la amenazó de ninguna manera y que eso no le preocupaba.